Que suene el son
Elisabet Hernández Valdés
Declarado Patrimonio Inmaterial de Cuba, el son encierra elementos musicales y extramusicales que nos identifican. Su salvaguardia y promoción requiere el compromiso de los profesionales, aficionados y amantes de la música cubana.
Adalberto Álvarez Zayas, El Caballero del Son, uno de los principales exponentes y promotor de este género, propuso declarar el 8 de mayo como Día Nacional del Son, teniendo en cuenta las fechas de nacimiento de Miguel Matamoros y de Miguelito Cuní, dos de las figuras imprescindibles en la historia musical de la nación.
El Instituto Cubano de la Música convocó a las empresas territoriales para desarrollar actividades que contribuyeran a la celebración. Los proyectos debían atemperarse a la situación epidemiológica de la COVID-19, que obliga a limitar las presentaciones con público e impone el uso de las redes sociales y los medios de comunicación masiva.
Bajo el nombre De Villa Clara te traigo un son se desarrolló el programa del 12 de abril al 8 de mayo. Esta primera edición del festejo en la provincia se dedicó a Martín Chávez Espinosa (Cascarita), Ernesto Ramos y Tony Guzmán. Se promovieron por las redes sociales videos, transmisiones online, trabajos televisivos y documentales sobre diferentes agrupaciones soneras de la provincia. Se realizaron entrevistas televisivas y radiales a prominentes músicos villaclareños cultores del género, como Alejandro Sánchez Camps, Sixto Llorente (El indio), Vionaika Martínez y Alexei Sánchez, El Nene, cantante de la orquesta Revé.
Uno de los objetivos trazados fue dar a conocer figuras como Ernesto Ramos, pianista, arreglista y compositor, exdirector de la orquesta Aliamén en sus años dorados, cuya genialidad hizo impregnar a la agrupación de un sello musical distintivo. Entre sus temas aún reconocidos por el público se encuentran «La merenguera», «Mi barrio» y «Canto a Islas Canarias».
El evento teórico se realizó en la modalidad semipresencial en el Patio Bar del Centro Cultural El Bosque, de Artex. Contó con la presencia de las investigadoras Isabel Díaz de la Torre y Arnelice Álvarez, y el experimentado locutor y realizador radial José Ramírez Call. El Centro Provincial del Libro y la Literatura colaboró con la actividad. En el encuentro se abordaron algunas problemáticas: la escasa presencia del son en las grabaciones actuales de los grupos musicales de la provincia y la necesidad de un local como espacio de socialización para las agrupaciones defensoras del género.
Otra idea bien acogida fue la propuesta por el Sectorial Provincial de Cultura para financiar un documental sobre Martin Chávez Espinosa, Cascarita, quien por muchos años fue la voz líder de Los Fakires, agrupación de gran notoriedad por su peculiar manera de «sonar el son». La mezcla entre los instrumentos es, sin dudas, uno de los productos suigéneris de esta agrupación. El saxo de su líder, Juan José Bringues Ochoa, sustituye al acostumbrado tres o el espacio que protagoniza la moderna trompeta en un septeto tradicional cubano. Aporta a la melodía y el contrapunto un timbre único; incorpora fraseos jazzísticos a la vez que se realiza una factura homófona contrapuntística de tintes polifónicos en algunos pasajes. Se augura que será un material audiovisual determinante y testimonio valedero para que las futuras generaciones conozcan las peculiaridades del son en Villa Clara.
En la jornada se desarrolló también un concierto homenaje por el centenario del natalicio de Benny Moré. Ideado y dirigido por Tony Guzmán, tuvo como base armónica la orquesta que este dirige e invitó a otros músicos para formar una gran jazz band. La presentación deleitó con la excepcional voz sonera y bolerística de Guzmán, a la par del acople de los músicos acompañantes. En el repertorio seleccionado el son se hizo presente como homenaje al Sonero Mayor.
El concierto fue visualizado a través de la página institucional de la Empresa Provincial Comercializadora de la Música y los Espectáculos «Rafael Prats» y ya forma parte del patrimonio de la entidad, fiel a su compromiso de propiciar que siga sonando el son.
